La miel: mitos y realidades sobre este delicioso alimento

Sin embargo, parece que la ciencia tiene “otros datos”, ya que existen algunos estudios que revelan la realidad sobre el contenido nutricional y calórico de la miel. Por un lado, este alimento está compuesto principalmente por fructosa y glucosa. Esos dos compuestos también están presentes en el azúcar de mesa, por lo que la cantidad de calorías contenida en la miel no es significativamente diferente a las que contiene el azúcar. A pesar de esto, la miel quizás sí sea una alternativa ligeramente mejor debido a que sí contiene pequeñas cantidades de vitaminas y minerales, por lo que podría traer más beneficios. No obstante, el impacto de esto en la salud no es sustancial, por lo que se recomienda que, así como el azúcar, la miel se consuma con moderación.

Lo que sí está comprobado en estudios son sus otros beneficios en la salud. Algunas investigaciones sugieren que hay algo de cierto detrás del mito de que ayuda a curar enfermedades respiratorias, pues se ha encontrado que puede ser más eficaz en el tratamiento de estas afecciones en niños que algunos jarabes medicinales. Además, su contenido en antioxidantes naturales, como el peróxido de hidrógeno, le otorgan a este producto propiedades antisépticas y antimicrobianas. Por lo que la miel sí es un producto muy útil que tener en la cocina, siempre y cuando, su consumo no sea excesivo.